Escena robada a Wong Kar Wai
"Siempre fantaseo con que me den un beso tan apasionado que me haga sangrar los labios", dije yo.
Ella rió.
Pasó un mes, tal vez más.
En una noche de alcohol, lo intentó por enésima vez y lo logró.
"¡Me están sangrando los labios!", grité, feliz, y la miré.
Me acerqué a ella nuevamente, pero evitó el contacto.
"No sé, podrías tener algo", acotó fríamente.
"Desencanto", quise responder, pero me callé la boca.
Ella rió.
Pasó un mes, tal vez más.
En una noche de alcohol, lo intentó por enésima vez y lo logró.
"¡Me están sangrando los labios!", grité, feliz, y la miré.
Me acerqué a ella nuevamente, pero evitó el contacto.
"No sé, podrías tener algo", acotó fríamente.
"Desencanto", quise responder, pero me callé la boca.
3 Comments:
TE escribo para tirarte un dato de una pelicula "a cock and a bull story", basada en el libro "Tristam Shandy, gentleman".
seguí asi con tu egoblog, va sobre ruedas.
Sergio.
El libro lo empecé a leer y resulta entretenido, bastante picante para ser del siglo XVIII. Pero no avancé demasiado, lo dejé para otra ocasión. La película de Winterbottom la quiero ver, pero no me atrae la idea de "cine dentro del cine", es un concepto que me molesta (salvo honrados casos). Es un libro inadaptable y Michael planteó una solución más bien vaga. Igual, la veré.
Gracias, Sergio.
Che...he llegado a tu pagina navegando de blog en blog...muy buenos articulos..escena corta pero agradable...roja fuego
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