Sunday, July 31, 2005

No love, no glory

Empiezo con una frase de Damien Rice, solista irlandés cuya fama pronto pasará. Nótese su hermosa balada melancólica "The Blowers Daughter", lo más interesante que tiene el film "Closer", y su himno guitarreado y violento "Woman Like a Man". Pero eso es irrelevante.
Me monto a la frase de Rice para hablar de ayer. Mi ayer. Que fue bueno, pero fue malo. Que fue satisfactorio pero me dejó vacío. Ayer fue sábado, señores, pero no llovió. Hubo niebla, pero no somos Londres y no llovió.
Cuando la melancolía es reina, los días se van en nada. Se come, se bebe, se duerme, se sueña. Se consumen productos relativos al ocio (televisión, cine, música, deportes) y la vida se va. En la crema de la existencia, en el esplendor de nuestros tiernos cuerpos jóvenes, la vida se va, se disipa entre los dedos. Y la dulce agonía de los sábados a la tarde fluye por la venas, deja un gusto agridulce que ni el hummus de la noche puede esconder.
Y siestas, y horas de Intenet, y el escaparse de lo trascendente para soñar por lo bajo que un día las cosas pueden ser de otra manera, en tierras lejanas, en mejores compañías, con gente menos mediocre emocionalmente y más siencera, más visceral, más personal.
Y llega la noche, y nadie me quiere hacer un reproche, porque no hay nada que decir. Y uno se entrega al alcohol no por ese desenfreno romántico y pasional, sino por rutina, porque no hay nada más que hacer, porque así se debe terminar un sábado a la noche, de aquí a la eternidad. Sin amor y sin gloria.
Y se sale y se buscan emociones ingenuamente, como un niño, crédulamente. Yo quiero creer, aún si mi escepticismo me dice otra cosa. Yo quiero que me mientan, al menos un ratito, y que me digan que hay algo de verdad por decirnos, que no sólo intercambiamos cortesías, o posturas, o dolores disfrazados de ideas. Y que la cerveza, o los maníes, o el picante mexicano, o la comida hindú, o incluso las lámparas de colores o los vestidos de antaño son sólo un condimiento y no la razón de nuestras vidas.
Y se baila, y se canta, y se cuentan chistes, o anécdotas o intimidades a extraños, como si eso nos acercara, como si realmente fuéramos más osados. Pero no nos vemos, no compartimos el espacio, construimos cubículos herméticos y te hablo pero no te hablo, te escucho pero en realidad no estoy acá.
Y disfrutamos la situación mientas no la comprendemos, porque el momento en que descubrimos lo que nos rodea es un instante de espanto súbito, de terror absoluto, ese espacio irrgular y descuidado que nos acoge por un par de horas, los cuerpos manipulados por ritmos rígidos y mecánicos, la violenta oscilación y el estricto código de pertenencia: o estas con nosotros o estás afuera. Veo tu deseo de pertenecer, pero la incomodidad en tu fracaso; veo tu soledad y me regocijo en ella, yo sé que querés ser parte de mi club, pero voy a pensar si quiero que compartamos grupo social. Lo voy a pensar mientras pruebo un sorbo de mi trago verde, mientras me acomodo los anteojos de sol, mientras corro ese sudor sexy que me cae por mi musculosa de Levis.
Y uno deambula, circula, saluda a viejos conocidos e improvisa caras sugestivas para los desconocidos, se esfuerza en mover el cuerpo sensualmente, se inventa un personaje sólido, inalienable, deseable. Pero estamos inseguros, alienados y el deseo ha muerto en el momento en que atravesamos el umbral. No podemos ganar. El sistema no nos dejará lograr los objetivos. Y la cuenta se hace regresiva, la desesperación latente. Hay que llenar los espacios, hay que hacer algo, hay que pasar el invierno. Que no se vea tu dolor, que no se enteren. Firmeza, disciplina, una muerte lenta y dolorosa, pero invisible.
Y la noche se acaba, a pesar de que uno la posterga. La mañana llega y no hemos cambiado. No hay un rayo de sol, no existe la desorientación de levantarse en una cama ajena, no hay un cuerpo caliente que no reconocemos. Estamos solos. Igual que ayer y anteayer y desde que tenemos memoria. Estamos solos, en la madrugada, volviendo al hogar que conocemos milímetro a milímetro, donde los olores no cambian, donde las imágenes son eternas. El cuerpo fatigado, el olor a cigarrillo impregnado en las prendas, ese frío tibio que corre por la piel. No hemos sufrido modificaciones, el mundo no parece un lugar mejor en el que vivir, ya no hay nada en qué creer. No hay consuelo de feria ni emociones adquiribles. Esto es lo que te mereces. Esto es todo lo que tu dinero puede comprar. La mañana me encuentra pensativo, relexivo, pesimista hasta extremos impensados, sospechando del aire. Solo, sin siquiera mi sombra. No hay teléfonos que marcar, no hay declaraciones de amor para hacer, no hay llantos desesperados. No hay nada. Ni amor ni gloria. Ni siquiera resignación.
Dentro de siete días la historia se repetirá, inexorablamente, hasta el final del tiempo.

Saturday, July 30, 2005

Sensibilidad y crudeza

El post del día está dedicado a Sam Shepard. Su poesía directa, visual y concreta me resulta hermosa y, si bien considero a la poesía una forma de expresión menor, ésta me llega sinceramente. A continuación, tres poemas que disfruto mucho del libro Crónicas de motel (edición de Aangrama, disculpen las gallegadas):

¿Por qué pienso
"este tipo está completamente loco"
sentado en un bar de pueblo
vestido con un traje de terciopelo negro, con chaleco
oliendo a Marica de la Calle Catorce
con un tic nervioso en unos ojos pardos
en los que casi no se ve la pupila?

¿Por qué pienso
"este tipo está chiflado"
cuando pregunta si ha nevado alguna vez en San Francisco
Si Herb Alpert toca a veces música clásica?

¿Por qué pienso este tipo esta majara"
cuando me dice que tiene muchísimo talento
pero le falta tiempo para desarrollarlo?

¿Por qué pienso
"este tipo está como una chota"
cuando coge la jarrita de leche
y la llama "Esta vaquita mona"?

Sé por qué
Porque no oculta
la desesperada distancia que lo separa de la gente.

12/1979, San Anselmo, California.


Ya he visto prácticamente
todas las narices arregladas
todos los dientes con funda
y todas las tetas remozadas
que puedo soportar

Me voy de regreso
a la mujer natural.

23/11/1981, Los Angeles, California.

Limpió los canarios
dio de comer a la Mula
se quedó traspuesto durante media hora

Cada mañana
limpiaba los canarios
daba de comer a la Mula
y se quedaba traspuesto durante media hora

Nunca había pretendido quedarse traspuesto durante media hora
Simplemente, lo ocurría
cada mañana

Quizá fuera por la pausa cuando terminaba de dar de comer a la Mula

El impulso ya gastado

Parecía exisitr un impulso natural
Que lo llevaba de los canarios
A la Mula

Simplemente, le ocurría
cada mañana

Era la pausa
después de dar de comer a la Mula
lo que le aturdía

Una Gigantesca Pausa

Hasta sabía qué tenía que hacer a continuación
Lo sabía muy bien

Sabía que lo siguiente era darse de comer a sí mismo
Después de dar de comer a la Mula

Pero era incapaz de moverse

Se quedaba traspuesto durante media hora
Mirando fijamente al desierto

Mirando a veces hacia su casa

Mirando a veces la bomba del pozo

Dependía de la dirección en que casualmente estuviera orientado
cuando se quedaba traspuesto

Llegó un momento en que tenía ganas
de quedarse traspuesto durante media hora

Era el momento culminante de la mañana

Limpiar los canarios
Dar de comer a la Mula
Quedarse traspuesto durante media hora.

15/1/1980, Homestead Valley, California.

Friday, July 29, 2005

Me lo ordeno el Señor

En la mitad de la noche, algo me despertó. Fue un instante místico, de rara belleza, cargado de incertidumbre y un poco de horror. No lo ví. Pero su voz fue nítida, transparente, distinguible. Cualquier otro sonido se apagó, La Voz (y no me refiero a Sinatra, claro está) se proyectó sobre el vacío. Sus primeras palabras fueron reveladoras: "La Biblia dice pelotudeces".
Estupefacción, asombro, desconcierto. "Fue un teléfono descompuesto entre un par de palestinos colgados y romanos borrachos."
Me siento en mi lecho, intentando divisarlo. "Soy como el Diablo, boludo, que es negro y por eso no se ve en la oscuridad."
Sigo sin hablar, dudano de mi propia sanidad. Intento volver a dormir. "No te duermas, tengo una misión para vos."
Abro bien grande los ojos. Verdad o mentira, esto tiene que ser bueno. Escucho con mayor atención. Soy un elegido, un mesías y estas cosas siempre le levantan el ego a uno.
"Vengo a avisarte que hay gente que tiene que morir. Escucháme bien porque no tengo tiempo de andar repitiendo las cosas, eh. Te voy a decir un par de categorías y vos después hacés lo que querés con eso, no sé, matálos vos mismo o comentáselo a otros. Eso sí: no esperes que yo te saque de apuros con la cana y esas cosas porque voy a estar muy ocupado jugando al Strip Scrabble con María Magdalena.
La gente que cumple con las siguientes caracteríticas debe morir:
- Los que usan remeras con frases provocativas que clamaramente no representan lo que ellos son. Ejemplos: "Pornstar" (usada por un nerd que nunca la pone), "Soy tu puta" (usada por una nena de 14 años), "Sexy" (usada por un bagarto), "Ramones" (usada por un chetito sanisidrense).
- Los que son o se hacen los rappers, usan cadenas y anillos de oro, remeras de hockey/baseball, pantalones amplios y hablan con montones de insultos y deformaciones de la lengua. Ejemplos: Ali G, todos los negros hiphopperos y el Sindicato Argentino de Hip Hop.
- Todo aquél que haya formado parte de la programación o sea partícipe de la gerencia del canal Telefé, así como todo integrante de la Editorial Atlántida. Que no quede ni uno.
- Todos los brasileros. Ya sé que los cree yo, pero le pifié, porque ese día estaba drogado y me salieron medio mal: son feos y sólo pude enseñarles a bailar, jugar al futbol y reproducirse. Encima hablan ese dialecto desagradable. Habría que hacerlos de cero.
- A los que crean movimientos a partir de elementos o costumbres foráneas, sobre todo si el movimiento no existe en el país de origen. Ejemplo más claro: los rolingas. No hay parecido entre los Rolling Stones y los rolingas, es una aberración. Los punks argentinos no están muy lejos tampoco.
- A los que destruyen al lenguaje en el trato cotidiano. Si se tragan los signos de exclamación o interrogación al comienzo de la frase, muerte sencilla (pastillas); los que abusan de la K como modo de decir la C o QU, muerte violenta (silla eléctrica o desmembramiento).
- Los que usan ropa medio indígena sin ser indios, los que se ponen ropa comprada en Bolivia (esos bolsitos de lana, remeras marrones con escote en V de material extraño, gorritos coyas de colores), los que tienen al mismo tiempo pelo largo y barba.
- A los cumbianteros, a los electrotontos, a los rumberos. Los metaleros se salvan porque tienen a Santiago Segura y al Mono Burgos, que son amigos de Satán y él me los presentó en una fiesta de Heavenly Swingers.

Por ahora eso es todo. Estáte atento, querido. Me voy, estoy apurado. Cuidáte."

Así se retiró. Como había llegado, súbitamente, una aparición. Sus palabras fueron inspiradoras y, como todo fiel religioso, intento seguir sus enseñanzas a ciegas, busco la Fe en los rincones, cumplo con sus deseos. No ejecuto su mensaje, ya que el mundo es demasiado basto y no sabría por donde empezar. Mejor sabrá él de eso y será el Día del Juicio Final, cuando la Llegada del Reino nos libre finalmente de tanto malnacido, de tanto deforme y de tanta mierda que puebla nuestras calles.

Thursday, July 28, 2005

El momento del Cabezon

Seguimos en la veta fútbol - espectáculo, caballeros. No poseo ni la vulgaridad ni el barbarismo del responsable de esta humorada, pero de todos modos intentaré reproducir la humorada que una vez pronunció en televisión de cable, en la señal de deportes Fox Sports, dentro del horario de un ciclo de debate futbolísitico entitulado "El equipo de primera". El señor es el inefable Oscar Ruggeri, hoy técnico en el futbol mexicano, histórico picapiedra y salvaje de los campos. Va así:
Resulta que el hombre va al médico y explica su problema.
- Doctor, no se me para.
A lo que el catedrático responde:
- Tranquilo, flaco, tomáte estas píldoras y vas a andar fenómeno.
El hombre se toma la píldora y se dirige a la casa. Antes de llegar a su residencia descubre con alegría que posee un inmenso bulto en su pantalón. Impulsado por esto, ingresa a su hogar, toma a su esposa, le arranca las prendas y la posee numerosas veces, de forma bestial e insaciable. Una vez concluido el acto, corre hasta la mucama, a quien también arranca la ropa y sacia su sed sexual con ella infinidad de veces. Aun afectado por las píldoras, el hombre toma a su suegra y repite el acto, una y otra vez.
Soprendido por el efecto que la píldora ha tenido en su anatomía, el hombre llama al doctor y le explica su problema:
- Doctor, ahora no se me baja. No puedo parar.
El hombre de ciencias pronto lo calma:
- Tranquilo, falco, andá a la heladera y metéla en algo frío.
El hombre se dirige a la heladera y lo primero que ve a mano es una jarra llena hasta el tope de leche fría. Introduce su miembro y esto pronto le produce un alivio.
Súbitamente aparecen en el umbral de la puerta de la cocina la mujer, la suegra y la mucama. Esta última, atemorizada, grita a las otras dos:
- ¡Rajemos, chicas, que está recargando!

Magia, genialidad y tacto de un hombre que nació para hablar públicamente. Su mensaje, claramente vinculado al deporte, la familia y el bienestar, será recordado. Bastaba ver la cara de Enzo Francescoli en esa misma edición para comprender sin palabras la relevancia del hecho en cuestión.

Tuesday, July 26, 2005

La columna del Bambi

El tipo es un histórico: representante del "fulbo champán", caballero grasa de los vestuarios, comentarista estrella de Fox Sports. Vino, vio y venció. Jamás llegó a ser un esteta del balompié, pero su jugoso vocablo, su afán por la noche y las compañías (no siempre legales) y su indiscutible estilo personal lo hacen único, un tipo querible, aún si un tanto amoral. Ante ustedes, el repertorio del Bambino Veira, cortesía de un amigo de la casa, el Loco Gatti.

1) "Guzmán, te saqué para protegerte!" (A Sandro "Batman" Guzmán, luego de sacarlo en el entretiempo. Guzmán casi no volvió a jugar al fútbol desde entonces. Ahora es Rastafari).
2) "JJ, essto no fue Newells-Talleres, hoy vimos Milan-Inter!" (A J.J. López, después de un Newells-Talleres).
3) "Diego, se te ve muy bien, muy flaco!" (A Maradona, cuando pesaba alrededor de 120 kilos).
4) "Cardetti, donde vayas, la vas a meter. Sos un excelente delantero y un ser humano excepcional" (A Martín Cardetti).
5) "La tecnología es una cosa de locos. Apretás un botón y estás en la NBA, apretás otro y estás en Moscú" (en relación a los mensajes de texto).
6) "¿Qué me parece el hotel?... Un poco antiguo... Y, yo creo que acá matarón a Drácula, nene" (sobre el Hotel Guerrero)
7) "¿Viste qué escenografía, pibe? Hermoso, esto es verdaderamente espectacular. La vista del mar motiva a los árboles, y los árboles motivan a los pibes..."
8) "¿Viste que calor estuvo haciendo en Buenos Aires? Terrible... Menos mal que estamos en Mar del Plata. Hasta Tarzán se insoló...".
9) "Pibe, yo tengo un laburo más difícil que el plomero del Titanic" (cuando no podía levantar a San Lorenzo).
10) "La base está" (cuando era DT de Boca).
11) "Estamos motivados"
12) "Boca no es un cabaret. Un cabaret es un lugar donde hay chicas... que se desnudan... ganan plata.... Donde muchas veces he ido ".
13) "Viste lo que es ese pibe! Va, viene... va viene... parece una autopisssta"
14) "¡Con el corazón, Klimowicz!" (cuando dirigía a Lanús le pidió eso al Granadero, pronunciando literalmente todas las letras del apellido)
15) "¿Funes? ¡Qué pija!" (cuando le preguntaron una referencia sobre el recordado delantero).
16) "Va a haber un clima tropical" (hablando en la previa de un clásico rosarino).
17) "Falta Shin Kelly" (en la previa de Banfield contra River cuando llovía a cántaros, haciendo referencia a Gene Kelly, protagonista de actuaba Cantando bajo la lluvia).
18) "Acá asaltaron a Rambo" (refiriéndose a los alrededores de la cancha de San Lorenzo).
19) "Estoy contra las cuerdas. Así, me parezco a Nicolino Locche".
20) "¡Qué barbaridá, cómo los hace laburar el Profe! Hace cansar hasta a los conitos...".
21) "¿Qué pasa acá con el viento? ¡Hagamos una macumba, no sé, pero hay que pararlo!".
22) "El pibe Peirone lleva el gol en el alma, es de esos que jugando bien, si no mete un gol, después no puede dormir"
23) "Entiendo la crisis del club, pero pedí un cuatro y me trajeron un pomelo... una Fanta de pomelo".
24) "¡Corré vos, que para eso te acostás a las 8 de la noche!" (A la Oveja Telch, como jugador de San Lorenzo, en un partido en que se estaban comiendo un baile y le exigieron al Bambi que corriera más).
25) "Abanicame el área, nene".
26) "¿Alargue? ¡Este se va directo a los penales!" (A un gordo en un avión que no se podía poner el cinturón y le pidió a la azafata un alargue).
27) "Estamos viviendo un momento de locura total ... Me quieren volver loco, pero quedate tranquilo nene, a mí loco no me van a volver".
28) "Decílo, Enzo ... ¡Decílo!".
29) "Nene... a mí me gusta tanto la noche... que al día le pondría un toldo".
30) Periodista: "Bambino, ¿Cómo está el campeonato hasta acá? " Bambino: "¿El campeonato? Misterioooso, nene ".
31) "Jorge tiene una gran personalidad, podría jugar hasta en Irak, nene!" (en relación al defensor colombiano, Jorge Bermúdez).
32) "Estamos pasando una racha diabólica "
33) "Pusimos un micro en el arco y la metieron por la ventanilla" (Como DT de Bolivia, en relación al ataque del equipo contrario).
34) "El resultado lo maneja Dios" (autógrafo que firmó).
35) "Le metió un papel carbónico al golazo."
36) "El fútbol, como la vida, es un estado de ánimo. "

¡Gracias, Bambi, por la magia! ¡Esperamos más de tus firuletes verbales!

Monday, July 25, 2005

Las mujeres son el enemigo

No soy un tipo machista. No pueden acusarme de eso. Ser machista implicaría reducir a la mujer, hablar de "inferioridad" nada más lejano de lo que yo pienso. Son seres complejos, intrincados, que dominan la táctica y estrategia. Abogan por la paz y el orden mientras urden por lo bajo un plan maquiavélico de dominación. Las respeto profundamente y por eso jamás podrán acusarme de machista. Pero sepan esto: son el enemigo y esta es una guerra que no pienso perder.
¿No resulta curioso que cada salida entre un hombre y una mujer se produzca cuando la mujer decide que se produzca? Ni hablar del sexo, territorio de decisión femenina por excelencia. Se asume que el hombre aceptará las condiciones impuestas porque es más básico en su composición psíquica y apenas si puede disimular su necesidad de sexo. La mujer abusa de este punto débil y no se esfuerza por buscar nuevos y más complejos desafíos, sino que se cuelga del pene del individuo masculino y lo manipula a piacere, sin perder esa sonrisa inocente y benigna. Se acabó, señores. Suficiente.
Como toda relación, es una relación de poder y no hay nada más importante que conservar el poder. Volverse homosexual (el camino más tentador y complaciente) no es una posibilidad porque eso no se elige y además el cuerpo masculino es horrible. La Naturaleza (fíjense que es en femenino, asi que tienen una aliada abarcativa y milenaria) las dotó de un cuerpo armónico y equilibrado y a eso es difícil resistirse. Pero también les impuso un conjuro oscuro y cruel: su belleza sólo puede durar un par de años, puesto que a partir de los 30 comienzan a envejecer velozmente, salvajemente, despiadadamente. Nosotros los hombres siempre podremos ser "el viejecito pintón", el Sean Connery, pero sólo una de cada viente hembras recibirá a la edad avanzada con gallardía y orgullo. Nacha Guevara es sólo una caricatura y a Catherine Fulop se le está acabando el tiempo.
No soy un poeta, sino un guerrero. No hago el amor, sino la guerra. No me pidan que elabore palabras bonitas, ni que llore en los rincones el amor perdido, ni que me siente a esperar a Cupido, para que clave una saeta rosa en mis entrañas. Yo peleo y no concibo al sexo o a las relaciones amorosas como otra cosa que una descarnada lucha hasta la muerte. La mujer es el enemigo y debemos ser astutos, los ojos bien abiertos, la lanza siempre en mano.
A ver qué dicen los especialistas:
- Alejandro Lombardi, economista: "Son todas iguales. Terminás haciendo siempre lo que ellas quieren."
- Santiago Segura, actor y comediante: "La patria es una fulana; menos mi madre y mi hermana, no hay coño que no esté en venta."
- Joaquín Sabina, músico: "Dios me castigó con la heterosexualidad."
- Ernesto Segal, abogado laboral: "Con ellas estás mal, sin ellas estás peor." (paráfrasis del refrán popular que cataloga a las féminas como un "mal necesario").

En fin, señores, la nuestra es una batalla perdida desde el comienzo. Pero no hay que desesperarse; siempre tendremos terrenos neutrales donde juntarnos y protegernos del mal femenino. Gracias a Dios que existe el deporte, el alcohol y los autos, temas siempre confiables y siempre placenteros para acentar la camaradería masculina.

Sunday, July 24, 2005

Cronica oriental

Rompí la primera regla tácita. Lo hice sin quererlo, me dolió en el alma, pero igual lo hice. Sabía que no podría evitarlo y sin embargo fingí por unos días que lo lograría. Mis mentiras son tan elaboradas, pensé... nadie lo notará, pensé... soy tan hábil pensé... pensé... pero no contaba con la horda desenfrenada de seguidores que este blog posee desde sus mismísimos comienzos. Esos mismos fanáticos animales que, ávidos de notas/posteos/anécdotas, derribaron el portón de mi residencia palaciega, exigiendo novedades. Señores, lo confieso: pasé más de un día sin subir un posteo. O peor: fueron varios días, creo que tres o cuatro.
Mi excusa es válida, sepan disculparme. Me fui al Oriente, esa zona del globo de bellezas extrañas, de costumbres lejanas y aromas inusitados... o simplemente me fui al Uruguay, que no carece de bellezas pero que representa un oriente vecino y menos glamoroso. Colonia del Sacramento, para ser específico, donde reside mi morada campestre, donde vuelco mis raptos bucólicos y románticos, donde mis alocados cabellos (o lo que queda de ellos) danzan a gusto de los vientos.
No diré, sin embargo, que grandes cosas ocurrieron, ya que se va allí a alejarse del mundanal ruido y no a vivir horas desenfrenadas de excesos y festines diabólicos. Fueron días de estudio, de reflexión recoleta, de buceo del alma (frase acuñada por un Filósofo de colectivo o un crítico de almacén).
Aquí mi top 10 de esta estadía en el Este:
1) El silencio: basta de mujeres que me queman el cerebro con su histeria barata y su parloteo de relleno, de hombres ignorantes y malhablados, de smog y bocinas, de televisores que no se callan y de radios contestatarias. Al fin tres días de vacío, de calma, de quietud.
2) Andar en moto: señores, mi padre el motoquero. A sus 54 años, se le dio por seguir los pasos de Pappo (Dios quiera que no lo lleve hasta las últimas consecuencias) y adquirió una Yamaha de motocross, que nos permite deslizar por la hierba, saltar por las dunas o golpearse violentamente luego de equivocarse con el freno. Fue una experiencia emocional única, y un mundo ideológico nuevo (?).
3) El hombre sin atributos: pude contactarme con el libro que tanto deseaba leer y no me ha decepcionado. Hay algo titánico, casi sobrehumano de leer una novela taaaaaaaan gigante (ahí te ves, Ulyses; keep going, Magic Mountain). Novela, tratado filosófico, perfil de época. Un libro particular, casi de culto. Eso sí, es saladito: 210 pesos en su librería amiga.
4) Las vacas: el animal más estúpido pero simpático del mundo. Bicho curioso, carne caminando, son como señoras viejas que en vez de ir al mercado comen pasto y duermen. Es hermoso cuando se chocan con el alambrado y les da la electricidad. Animal bruto, sin memoria, sin sensibilidad, pero entrañable... si uno les canta un tango, parece que se quedan...
5) Los lacteos uruguayos: les patean el culo a los argentinos. Basta de joder con "lo nuestro"... una sola mousse Parmalat, un sólo queso/yogurt/lechita Colet de Conaprole valen más que toda la producción agropecuaria argentina. ¿Vieron? ¡Al final no sólo son mejores tipos que nosotros sino que además tienen mejores productos alimenticios y probablemente mejor mate!
6) Dormir: en estos territorios donde el aire es fresco y el silencio total (ver puesto número uno), se duerme tan plácidamente que cuesta despertar. El cuerpo se relaja, no hay prisa y el frío invernal invita a quedarse. Dormir nueve horas es poco en este paraíso pastoral. Según la doctora Itatí Di Guglielmo, abogada y productora ejecutiva cinematográfica, los músculos sufren una descontracción general que genera un estado de somnoliencia extremo, pero esta teoría aún no ha sido verificada.
7) Los juegos de mesa: ayudan a matar el tiempo y al mismo tiempo desarrollan el intelecto. En una veloz partida de Scrabble humillé a mis padres (oh, sí, el Toro tiene padres... ¿Qué creían? ¿Que me engendré sólo? ¿Qué sería entonces? ¿Cristo? Mmmm) en una demostración más de erudición e inteligencia práctica. Todavía se los puede escuchar llorando en los rincones.
8) La fauna local: los animalitos tienen instintos y poco los importa nuestra pacatería o nuestros modales o nuestra moral. Ellos viven en su medio natural y, si uno decide construir una casa allí, de poco vale pedirles que la desalojen. Esto puede ser o bien bueno (vemos animales salvajes gratis, cerca, sin tener que encender el Discovery Channel) o malo (invaden, destruyen, molestan, hacen ruido). Un extraño roedor de afiladas pezuñas se descargó en altas horas de la noche con el deck de madera, aberrantes pájaros carpinteros agujerearon las paredes de ladrillo y más de una mulita distraída invadió los pagos, con carita de "¿Quién? ¿Yo?".
9) Los ánimos de la gente: todos relajados, todos considerados, todos colaboradores, todos bienintencionados. En estas tierras, esos seres insportables e insistentes a los que llamamos padres se vuelvern moderados, se ocupan de asuntos que consideran más relevantes (traer madera para el fuego, encender la estufa, hacer compras de víveres, hablar con pintores, hacer visitas sociales) y libran a uno a su total albedrío, en silencio y civilizadamente. Se comparten charlas amenas sobre deportes, alimentos o temas emocionales y cualquier gresta es veloz y fácilmente olvidada. Ah, el campo.
10) El encuentro blogger: antes de partir, el Gran e Ilustre Nazachong me llevó a conocer a miembros de la numerosa comarca blogger, algunos de los cuales ya se habían topado con mi feroz escritura en comments o posteos en blogs de amigos y probablemente esperaban a un matón sanguinario de 2 metros y 200 kilos, una bestia prusiana con el apetito de un oso polar y la violencia de un puma en celo. Sorpresas en sus rostros ante este efebo de tez cándida y pose de caballero, enfundado en atuendo oscuro y cuidado, la mirada firme, el brazo inquebrable. Resultó ser buena gente y, sin bien entendí poco de las encendidas contiendas musicales, intriduje sendos comentarios sobre películas y salvé las apariencias. Es de esperarse que se repita, ya que este blog necesita aliados o camaradas, como modo de conquistar al mundo.

Olvidables serán la lluvia, la falta de deportes, la cobardía de Gaudio, la canallada de Nadal, la falta de joda nocturna o los paupérrimos capítulos de Curb your Enthisiasm.
Señores, estoy de vuelta. No se alteren, no sufran, no vengan a mis puertas. Cuando Cadmo, el Toro, se pone a escribir, no hace falta que Mahoma vaya a la montaña pues ella sola, mansa, se deposita a sus pies.

Thursday, July 21, 2005

Esa tierna debilidad

Dicen que los noventas no produjeron nada bueno. Patrañas. Dicen que Hollywood ya no es lo que era. Mentiras groseras. Si nos tomamos unos breves instantes para reflexionar y abundante tiempo muerto en nuestras vidas como para hacer zapping, descubriremos que hay infinidad de películas (que el cable repite una y otra vez) que simplemente no podemos dejar de ver. Están dobladas, con cortes publicitarios cada dos segundos y censuradas, pero su calidad cinematográfica es tan intensa que tenemos que verlas por enésima vez, revivir cada instante como si fuera la primera vez que lo vemos. No siempre son buenas películas y no siempre han sido bien tratadas por público o crítica (como si alguno de los dos parámetros importara), pero nosotros las amamos por ser, simplemente, encantadoras.
Las restricciones o condiciones son las siguientes:
1) Todas las películas deben haber sido producidas por esa tierra ficticia y atemporal llamada Hollywood.
2) Todas las películas deben haber sido realizadas en la década del noventa.
3) No se puede repetir directores, aún si muchos se lo merecen. Se pone la mejor de cada uno de ellos en esa década.
4) No cuenta la calidad artísitica, sino la capacidad de la película de ser vista infinidad de veces sin cansar o aburrir.
5) No hay jerarquías, todas son igual de buenas.

Sin más, comenzamos:

- Groundhog day (Harold Ramis, 1993): Conocido aquí como El día de la marmota o Hechizo del tiempo, es una de las diez mejores películas de todos los tiempos. Sin ser una pieza de autor (nunca más volvió Harold Ramis a hacer una película a la altura de esta), es una feliz conjunción de un guión maravilloso (metafísico y a la vez divertido, noble y a la vez disparatado, tierno y a la vez cínico), de un actor más grande que la vida misma, de un elenco secundario notable y de un roedor que prevee el clima. Toda universidad de cine debería partir de esta película para enseñar como narrar, como montar, como manejar diálogos y timming, como dirigir actores, como trabajar el sonido... Me quedo con una frase del enorme Phil Connors: "¿Cómo que esta línea es para famosos o emergencias? Yo soy ambas".

- Back to the future III (Robert Zemeckis, 1990): sin ser la mejor de la serie, es la única que pertenece a los noventas y es aún así hermosa. Un homenaje al western clásico sin dejar de lado a lo mejor de Sergio Leone y Clint Eastwood merecía estar en la lista. No sólo eso: cierra a la perfección con la serie entera y maneja la misma adrenalina y alegría que las películas anteriores. Zemeckis nunca pudo repetir una mezcla tan explosiva, guiada por el encanto sin igual de Marty y Doc.

- Hudson Hawk (Michael Lehmann,1991): Sáquense el sombrero, señores. Clase, glamour, notables chistes y un robo al Vaticano. ¿Más razones? Criminales con nombre de chocolates, David Caruso haciendo de mimo, Danny Aiello imitando a Sinatra, Bruce Willis autoparodiándose en Moonlighting y un personaje llamado George Kaplan, en honor a Alfred Hitchcok y su Intriga Internacional. Y Sarah Bernhard haciendo lo que mejor sabe, de psicótica. Es un coctel hermoso, arriesgado, que mezcla a Da Vinci con los croones de los 50 y tira en la mezcla a lo peor de la cultura norteamericana. Otro caso de "one hit wonder", esta vez para el mediocre Michael Lehmann, que sin embargo haría más tarde otro hit noventero, "Airheads" (no incluido para no romper la regla 3).

- Rushmore (Wes Anderson, 1998): Una de las películas más tiernas y a la vez tristes de la década, la marca registrada del director. Es la perla más lograda de su carrera, balanceda, armónica, contagiosa. El duelo Murray - Schwartzman es tan noble y aventurado y adrenalínico que le transmote a uno felicidad incalculable. Todos los puntos fuertes de Anderson están presentes: una banda de sonido gloriosa y variada, la camaradería y las derrotas felices, la bondad y las bromas pesadas. Aún antes de los Tenenbaums, el director nos dejaba a más de uno boquiabiertos, pidiendo por más.

- Before Sunrise (Richard Linklater, 1995): Linklater empezaba a demostrar por qué es tan importante para el cine actual. Una comedia romántica inteligente, sensible, fuera de las convenciones y de los límites del género. Un efecto de realidad perfecto y para nada demagógico, una ciudad europea (Viena) que pocas veces fue mostrada con tal color y luminosidad, una pareja hermosa, real, tangible, adorable. Todo en esta película está donde debería estar y cada plano secuencia es impagable, notorio. Quien no sufrió con el final (todavía no sabíamos que habría secuela) no merece mi respeto.

- Fear and loathing in Las Vegas (Terry Gilliam, 1998): la mejor película sobre las drogas de la historia, una de las mejores adaptaciones de una novela de la historia y sin dudas el mejor film de Gilliam. Depp no actúa de Hunter Thompson, porque ES Hunter Thompson. Diálogos memorables, imágenes lisérgicas, cocodrilos alcohólicos y murciélagos ruteros. Por primera vez una novela brillante recibe una adaptación literal brillante, casi una transposición, casi un complemento. Esta todo allí: los setentas y Nixon, las drogas y el hippismo, el fin de un sueño y el comienzo de una pesadilla. Toda una cultura deglutida y descripta desde las entrañas, todo una contingencia política y social caldeada, toda la necesidad de un generación de escapar de sus mandatos, la nostalgia y la psicodelia. Además, un elento francamente notable.

- Great Expectations (Alfonso Cuarón, 1998): Cuarón no filma, pinta. Y cuando lo hace, sus verdes son tan intensos que se hacen imborrables. Todo el tedio del libro de Dickens fue reemplazado por esta fábula moderna de amores imposibles y corazones rotos y una nostalgia dulce, incluso por lo que no se ha vivido. Otra majestuosa banda de sonido y un conjunto de individuos encantadoramente trágicos; porque amamos a Mrs. Dinsmoor a pesar de su psicosis; amamos a Arthur Lustig por su nobleza, aún si es un maleante vulgar. Incluso a Estella, quien es más la víctima de una madre engañada que un objeto de maldad. Técnicamente hermosa, al borde de arrancar un lágrima a partir de una iluminación centralizada virada al verde (cuando no) y delicados movimientos de cámara, no hay manera de no identificarse con Finnegan Bell, ese encanto llamado Ethan Hawke.

- Shawshank Redemption (Frank Darabont, 1994): aquí estrenada como Sueños de Libertad, el tercer caso de la lista donde un director mediocre o artesanal produce una película maravillosa. Extraordinario drama carcelario, sacó lo mejor de la novelita de Stepehn King y construye un relato fragmentario y hacia atrás, relatando la mejor fuga y venganza de la historia del cine (Incluso mejor que Escape de Alcatraz). Tim Robbins finalmente se puede lucir en un rol a su medida y Morgan Freeman nunca podrá dejar de ser Red, a quien ya quiero como si lo conociera. El trabajo con el gris, los planos cenitales de la prisión y esa melancólica pieza musical que atraviesa la película no dejan de impactarme. Y si alguien dice que no se emociona con la muerte de Brooks o con la secuencia en que Andy pone la ópera por los altoparlantes, simplemente se está perdiendo de entender de qué va el cine.

- Pulp Fiction (Quentin Tarantino, 1994): No voy a agregar más a lo que todos ya saben. Ñoño y todo, excesivo y todo, Tarantino hizo una película demasiado buena para ser verdad. Y si bien uno puede empeñarse en criticarla, verla de vuelta cada vez deja más en claro por qué marcó a la cultura popular que vendría.

- Ed Wood (Tim Burton, 1998): un gigantesco acto de amor. Un acto de amor personal, burtoniano, pero sincero y, sobre todo, hermoso estéticamente. Johnny Depp vuelve a decirnos que ningún otro galán actual actúa como él lo hace, los pulpos gigantes de goma pueblan la pantalla, Orson Welles le da a nuestro protagonista coraje y, por si fuera poco, tenemos a Bill Murray haciendo de las suyas. Desde el centro mismo del mainstream, un voto a favor de los geeks, de la clase B, del amor al cine y del amor a un género. Burton incluso le permite a Wood tener una premiere mundial, moño de oro a la gran revancha que Ed se da desde su tumba.

- Die hard with a vengeance (John Mctiernan, 1995): Mctiernan vuelve al juego luego de la decepcionante secuela dirigida por Renny Harlin y nos mete nuevamente en la vida frenética de John McClane, el duro de matar. El tipo es lo que todo hombre querría ser: se corta, anda borracho, la barba crecida, en camiseta, tira tiros y salva a todos, al mismo tiempo que mantiene su sentido del humor. Hay que quererlo sí o sí y verlo escapar de cada nueva humillación de Simon es un festín absoluto. Recuerden la escena de McClane con el cartel de "odio a los negros" en pleno Harlem. Eso es comedia de primer nivel sin escaparse de la trama. Samuel Jackson resulta un complemente perfecto y la adrenalina se acumula, se apila, crece. Acción de la mejor, matizada por diversión pura del mejor estilo Willis.

- Reality Bites (Ben Stiller, 1994): una pequeña reflexión madura de Ben Stiller, quien sorprende jugando el rol de villano yuppy. Adolescentes pasados de edad, tensiones amorosas y las insatisfacciones de no haberse jugado las fichas que se debían. Ethan Hawke y Wynonna están al borde de la belleza absoluta y cada encuentro entre ellos es glorioso. El clip para la MTV de los videos caseros con los rinocerontes cogiendo es un momento tan gracioso como trágico. La generación X, sin golpes bajos, sin clichés y tratada con empatía y cariño.

- The Big Lebowski (Joel Coen, 1998): los hermanos Coen decidieron simplemente dejar de ser cínicos al pedo y al mismo tiempo le dieron a Jeff Bridges el mejor rol de su carrera, construyeron la mejor alegoría sobre la era Bush (padre) y la Guerra del Golfo, sin por eso descuidar los diálogos que son de lo mejor de la década. Todo en esta película es maravilloso, todos los personajes son encomiables, todo tiene un fin perfecto, todo cumple una función, toda unión del montaje dice algo. No sólo nos enseñó a pasarla bien, sino que con ella descubrimos al trago White Russian y decidimos pasearnos en bata. Esta película es la libertad absoluat y hay pocas tan lúcidas, tan dinámicas, tan disparatadas y tan reflexivas en toda la época. This agression will not stand, man.

- Don Juan de Marco (Jeremy Leven, 1995): sensiblera, lacrimógena, extrema, sí. Pero es hermosa y saca lo mejor en cada uno (el espíritu navideño, ja). Vemos a Brando luego de mucho tiempo y, aún gordo y todo, tienen una presencia abismal, que se complementa con la frescura de Depp, tal vez el Brando de nuestra época. Es todo meloso y estereotipado, pero genera simpatía inmediata y cuenta con una gran colaboración entre Bryan Addams y Paco de Lucía, titulada "Have you ever really loved a woman?"

- The bridges of Madison County (Clint Eastwood, 1995): Clint nos convence de que no sólo es un gran director sino de que no sólo de héroes de western y oficiales racistas vive el hombre. Envejecido y tierno, Robert Kinkaid es un hallazgo para el director, quien se reinventa y hace de una novelita de cuarta una épica historia de amor prohibida, un adulterio pasional para parejas post-40. Una sensibilidad y una fluidez tal sólo está en tipos como Eastwood, pero no hay muchos melodramas modernos tan hermosos, delicados y bien fotografiados como este.

- A life less ordinary (Danny Boyle, 1997): Boyle se va a Hollywood y se lleva consigo a McGregor. Atrás queda la sordidez de Trainspotting y nos topamos con una road movie-comedia romántica-delirio religioso-melodrama-musical aboslutamente fuera de órbita. ¿Quién le dio el visto bueno a este delirio? Gran acierto, ya que este coctail pasional resulta magnético, y nos lleva a un disfrute casi infantil, hermosamente naif y al mismo tiempo alocadamente sexual. Un elenco fabuloso (Delroy Lindo, Holly Hunter, Dan Hedaya, uno mejor que el otro) y un descenlace de cuento de hadas punk.

- There´s something about Mary (Peter y Bobby Farrelly, 1998): la mejor película de los Farrelly, la que sentó las bases, la que les dio notoriedad, la que definió que un humor violento, grosero, escatológico y políticamente incorrecto puede al mismo tiempo ser noble, democrático e hilarante. Plagada de chistes antológicos (los dientes postizos, el perrito, el hermano de Mary, Warren) e invadida por dos músicos que acotan de manera impecable a cada instante, no hay momento de la película que no nos haga reir o sentir vergüenza o asco con igual intensidad. Un mérito dudoso, pero sin dudas original.

Hasta aquí llegó mi memoria. Prometo más revisiones de películas, cuando sea que la memoria me de, o las ganas o me den o cuando no esté pegado al cable, buscando a alguna de estas joyas para verla una vez más, que seguro no será la última.

Wednesday, July 20, 2005

Hipocresia y autocelebracion

Cada año, la señal de deportes ESPN entrega sus premios al deporte norteamericano, llamados ESPY. Basados en el mismo esquema que todas las entregas de premios en ese país (Oscar, Emmy, Tony, Grammy…), los presentadores son un compendio de atletas, actores, cantantes y demás gente “famosa”, esa categoría grosera que separa a la población de esa Nación, una categoría más para definir a la exclusión, regla dorada de ese país del norte. Las ceremonias suelen ser aburridas, esquemáticas y absolutamente fallidas; basta ver a los presentadores leyendo de carteles, intentando ser graciosos cuando claramente se nota que desearían estar en cualquier otro lado menos allí.
Los ESPY de este año no merecerían mayor comentario, ya que constan de lo ya mencionado, más algunas actitudes típicamente gringas: los grititos constantes a cada palabra pronunciada, los discursos demagógicos, los negros (debería decir afroamericanos, ya que es un país “democrático” y “políticamente correcto) violentan el lenguaje con sus “yo, yo” antes de cada frase y sus códigos de ghetto, etc. Pero llegó un momento que no puede ser pasado por alto, no sólo por su patetismo sino porque pinta a esa sociedad de pies a cabeza. El premio Arhtur Ashe es entragado a “la valentía y el coraje”, lo cual es un eufemismo para hablar de los discapacitados y marginados que son “honrados” por un ratito para que todos sientan que viven en una sociedad igualitaria, o purguen sus pecados de frivolidad o se sientan un poco más cristianos. Que el premio sea presentado por Oprah Winfrey ya es un despropósito, ya que esta señora – la Susana Giménez del norte – es sinónimo de escándalos televisivos e imagen viva del Nuevo Rico ignorante, desagradable y pretencioso, que desea eliminar a aquello que no cuadra con su mundo aristocrático fraudulentamente adquirido.
El despropósito vino después: un extenso video de Jim Macbride y Emmanuel Obufu Yeboah, ambos discapacitados. La música sensiblera, los discursos a favor de la vida y las imágenes artificiales de ambos lisiados por campos amarillos no sorprenden a nadie. Pero el grado de detalle con que se describen las desdichas de ambos personajes es indigno incluso para el peor drama hollywoodense. Macbride era el Sueño Americano personalizado, jugaba al football (ese ritual animal que a los gringos tanto les gusta), empezaba a dar sus pasos comoa actor y las chicas lo coreaban. Vemos allí la obsesión de ese país retrógrado por el éxito a toda costa, esa necesidad de dejar de ser “común” para pasar a ser “famoso”, como si eso los alejara de la mediocridad. Macbride no sólo perdió una pierna en un accidente para luego convertirse en un maratonista discapacitado, sino que al tiempo tuvo otro accidente donde quedó parapléjico, olbigado a moverse en una silla mecánica. A esta altura uno hubiese rogado por la eutanasia, pero este hombre, fiel al ideal norteamericano “se aferró a la vida”. Yeboah nació sin la tibia en una de sus piernas, pero el niño luchó contra los prejucios, consiguió una bicicleta y recorrió su nación, para llamar la atención de todos. El documental aprovecha para subrayar que en Ghana todos son pobres y enfermos y vagabundos y que Yeboah quiere ser diputado, casi burlándose de su ingenuo sueño de salavar a su gente. Se convirtió en ídolo nacional y ejemplo de todos.
Termina el video, que se ha hecho eterno y que representa un golpe bajo de gigantescas proporciones. Todos lloran, todos se ponen de pie, todos aplauden, los sponsors ceden su valioso tiempo para que la emoción cunda. Hipocresía de la peor, falsedad indisimulable. ¿Qué carajo les importa a las celebridades un africano sin una pierna y un gringo descastado por su condición de lisiado? ¡Nada! ¡Admítanlo! ¿Qué pasa con esta sociedad que tan abiertamente separa a los ricos de los pobres, a los famosos de los ignotos, a los blancos de los negros, pero que no puede aceptarlo, que no puede hacerse cargo de lo que es, que necesita que alguien le diga que es buena y noble y respetable, pero a falta de palabras bondadosas se celebra a sí misma?
¿Existe otro ejemplo en la historia de una población tan homogénea y unida por los peores defectos posibles? ¿Cómo puede ser que tanto los gordos rosas como los negros de los suburbios como los hijos de inmigrantes piensen exactamente igual, sean igual de patrioteros, sean igual de hipócritas y sensibleros? ¿Por qué todo el país baja línea sobre el bien, y hacer el bien y ser correcto? ¿Tan hondo caló la herencia protestante que produjo una sociedad moralista, pacata, reaccionaria e ignorante? ¿Cómo es posible que Hollywood, las ligas deportivas, la política y la literatura bajen el mismo mensaje falso de que todos somo iguales, al mismo tiempo que se autoproclaman como “América” como si no hubiese todo un continente debajo de ellos?
Son infintas las preguntas que surgen y, si uno lo piensa dos segundos, es imposible no maravillarse tanto positiva como negativamente: ni Hitler logró un consenso en la población como existe en Estados Unidos, indistintamente de quien es el presidente de turno; es una coalición ideológica grosera e irreponsable, pero perseverante. Llama la atención que una masa tan variada tenga una misma identidad, basada en el desconocimiento sobre el resto del mundo o, peor aún, el desinterés en ampliar ese conocimiento. Y resulta increible que todo evento cultural surgido de esa tierra sea un reflejo tan notorio de lo que toda una nación desea, de lo que toda una nación cree. Por eso cuando una voz disidente aparece, rápidamente es callada. ¿Porque es un peligro para el global? No, porque esa sociedad no es flexible y no acepta el cambio. Sino porque la posibilidad de ser diferente es impensada y necesariamente lleva a la exclusión. Esa misma exclusión que el país entero se niega a admitir y que tapa con eventos de caridad y premios especiales, para autofelicitarse durante dos segundos de qué bondadosa es y convencerse, al menos brevemente, de que Dios nació en los Estados Unidos de América.

Tuesday, July 19, 2005

A un paso menos de bailar con la Parca

Señores: mañana cumplo años. Veintidos, los dos patitos. No me siento más viejo, no me pone triste, no me alegra, simplemente no siento nada. Pero es sabido que cada cumpleaños es ocasión obligada para rever qué hizo uno con su vida o qué objetivos logró o lo que sea que uno hace en estos casos, sea filosófico, reflexivo o new-age.
No sé si soy lo que alguna vez quise ser. Probablemente no. Probablemente nunca lo sea.
No creo que sea una estrella de rock, pero creo que ese nunca fue mi plan. Dudo que llegue a ser una estrella de Hollywood, pero esa gente sabe de muy pequeña que quiere brillar en La Meca y suelen tener infancias perturbadas (ejemplo: Macaulay Culkin; contraejemplo: Natalie Portman). ¿Llegar a ser un gran realizador? Todavía hay chances, pero me parece que eso no depende tanto de uno sino del reconocimiento (merecido o no) que los otros nos dan; y la verdad que no requiere tener mucho glamour, porque los verdaderos autores suelen ser gordos, o pelados, o tener anteojos gigantes, o cejas peludas (Scorsese cumple con las últimas dos y además es italiano.... guácala).
Lo cierto es que a mis 22 tacos, ya ven ustedes, igual sigo de flaco, igual de calavera...
Vale la pena revisar uno a uno los aspectos de mi vida hoy en día, a la manera de un horóscopo de pacotilla:
Salud: mejor de lo que debería estar. Es verdad que uso anteojos/lentes de contacto, pero no implican un problema mayor (aunque reconozco que sin anteojos soy mucho más apuesto). Mi constante pérdida de cabello es un ataque al ego pero un tipo tan estresado como yo no podía esperar menos. Tendencia a morderse los dedos y acariciarse el cuello notoria, pero no demasiado molesta. Mi consumo constante de sustancias prohibidas debería matarme antes de los 30, pero todos sabemos que los viciosos son los que más viven porque tienen al diablo de su lado...
Dinero: no lo gano, no lo produzco y baja desde arriba. Cuando me tomé el trabajo (jajaja) de trabajar, el dinero entró a mi cuenta y fue invertido en causas justas, como producir cortometrajes (mi arte). Pero básicamente me lo dan a cambio de... ser hijo y lo administro con cautela.
Amor: un punto álgido y ambiguo en toda la vida de un adolescente (palabra que detesto, pero que sin dudas se aplica a mí). No sabría decir... reconozco que los anteriores posts dan a entender que está todo mal, pero la cosa no es tan así. Puede que haya novedades pronto, pero no quiero apresurarme. Sigan conectados para más información.
Satisfacción: complicado. Más allá de mis aspiraciones imposibles, más grandes que la vida, la existencia no me maltrata. Soy una drama queen, pero las cosas más o menos marchan. Ya terminaré de escribir mi largometraje y ganaré Cannes (ejem), ya escribiré mi novela en diez tomos (ejem, ejem) y ya postularé mi teoría metafísica, pseudo religiosa, pseudo mística (ejem, ejem, ejem). ¿Soy feliz siendo un cineasta? No sé. ¿Soy feliz siendo un filósofo? Menos aún. ¿Quiero irme a trabajar en un barco pesquero japonés en Noruega? Muy probable. ¿Lo haré? Lo dudo. ¿Y si pongo un restaurant en Hanoi, un puterío en Marrakech, o me dedico a consumir opio y jovencitos en Argelia? Todo puede ser... La felicidad es una pistola caliente, amigos.
Insatisfacción: siempre. Constante. Eterna. Un poco de odio, otro de resentimiento. Todo parece poco. O no, no sé, da igual. No me molesten.
Cercanía a lograr los objetivos: quien sabe. Lo único que sé es que las vacaciones son malas para el espíritu. Todo el día al pedo, mirando películas, jugando al solitario, escribiendo para este blog (ejem), durmiendo, etc no ayudan a ser mejor persona o a ser admirado por las masas o a que las muejeres se masturben pensando en mí (ejem, ejem). Espero que terminen pronto, así me reactivo otra vez.

Este fue un breve análisis de mi vida en este momento. Si a usted se le ocurre una forma de mejorarla, o de que yo pueda vivir en un castillo o de que yo pueda ir de fiesta con Pierce Brosnan a levantar chicas orientales, por favor llame al 0-800-TORODIOS-DE-LOSHOMBRES-Y-SABIO (3 pesos màs iva el minuto) o simplemente deje un comment, que los leo y me hacen feliz.

Monday, July 18, 2005

A coger que se acaba el mundo

Lo dijeron mil veces, pero nunca quise poner atención...
Señores, se confirmó: se acaba el mundo. Mentira, no se acaba, pero se viene un cambio importante en nuestras vidas.
¿Sabes tú, amiguito, qué es una resonancia Schumann? ¿Y el así llamado Punto Cero? ¿Sabes quién es Gregg Braden? No te explicaré yo esas cuestiones. Entra a http://www.bibliotecapleyades.net/esp_ondas_shumman_1.htm y averígualo por ti mismo. Como sé que no lo harás, te explicaré brevemente lo que pasa.
La Tierra tiene una frecuencia base, medida por la Resonancia Schumann. Este valor se mantuvo estable durante miles de años en 7.8 aproximadamente, pero desde los años 80, fue creciendo y hoy en día ronda el número 12. Se cree que al alcanzar la cifra 13, la Tierra se detendrá durante tres días y comenzará a rotar en la dirección opuesta. Sí, lees bien: se irá todo a la mierda.
El bueno de Gregg Braden recorre todo Estados Unidos anunciando estas cosas y probablemente aquí el hijo de Tu Sam o esa psicótica que dice que es hija de Kennedy y Marylin Monroe se hagan eco; lástima que sean tan ignorantes y que sean incapaces de enfocar un tema físico-metafísico como este. Gregg, que parece más un motoquero de los ochentas que un matemático y científico como alega ser, nos hace notar que ya los mayas en su calendario había previsto esto, que el ejército gringo ya lo sabía, a través de su proyecto secreto Montauk, e incluso ciertos sectores budistas, liderados por Bhagavan, anuncian que este cambio traerá aparejado una iluminación masiva de mentes, donde algunos miles de elegidos lograrán romper la barrera de sus conciencias y se abrirán a Dios. Según este señor, desde el año 2003 estamos en la Edad de Oro. ¿Ustedes notaron el cambio? No me mientan.
El año, para todos, es el 2012. En el 2012 se va todo al carajo, algunos nos iluminamos, otros nos perdemos más de lo que ya estamos y otros siguen igual. La ignorancia es una bendición.
Ahora bien, amiguito: ¿Sabes qué es un cinturón de fotones? Averígualo: http://www.bibliotecapleyades.net/esp_cinturon_fotones_1.htm#cinturon. Pero sé que no lo harás, por lo que te explico para que tu mente limitada por los excesos comprenda: existe un cinturón de radiación compuesto por fotones, los cuales se producen de la siguiente manera: cuando una antipartícula es formada, aparece en un universo de partículas ordinarias, las que en una fracción de segundo se encuentran y colisionan con un electrón. La carga (eléctrica) se cancela, y la masa total de la partícula es convertida en energía en la forma de FOTONES.
La Tierra atravesará dicho cinturón de fotones próximamente. Los cambios serán siderales. A continuación una descripción de lo que pasará:
"La entrada a este Cinturón será gradual; primero entraremos a una Zona Nula, la que demorara aproximadamente dos días, para entrar a una zona en la que la oscuridad será total y que durara tres días donde los aparatos eléctricos no funcionarán, producto del hipermagnetismo existente, para después entrar en la parte mayor, donde como ya mencionamos, se va a experimentar luz sin fin (24 horas al día) durante 2.000 años y finalizará cuando el sistema solar salga durante otro periodo de cinco a seis días nuevamente, para entrar a un nuevo periodo de oscuridad que es lo que observamos actualmente, vale decir, día y noche. Sin duda, que este acontecimiento espacial producirá muchos cambios en las manifestaciones de la vida, al igual como ha sucedido en otras épocas de nuestra historia. Por ejemplo, las glaciaciones y otros cataclismos que han modificado la geografía del planeta; pues según parece, el anillo de Alción nos traerá grandes beneficios, pero también grandes calamidades, por lo menos en el principio."
Nótese lo siguiente: 1) dos días de apocalipsis, sin electricidad; en palabras de Snake Plissken: "Bienvenidos a la raza humana"; 2) ¡2000 años de luz sin fin! ¡ya no podremos manosearnos en la oscuridad! ¡Nunca más fiestas alocadas cuando mamá y papá no nos ven!

Me parece que la evidencia es elocuante. No importa tu raza o credo, amiguito, tu destino es igual: la Tierra cambiará su dirección de rotación, el clima y las condiciones atmosféricas serán modificadas, la luz será eterna, tú también envejecerás (???). Y cuando lo hagas, fantasearás que cuando eras joven los precios eran razonables, los políticos eran nobles y los jóvenes respetaban a sus mayores. Respeta a tus mayores.
Hasta la próxima, terrícolas.

Sunday, July 17, 2005

Todo en una noche + S.O.S.

Hubo una época en que yo era una máquina de relatar salidas nocturnas. Desde el espacio de blogs amigos (especialmente Cantate algo, ver barra de links), jocosamente construía mis noches y hasta las retocaba para que los amigos pudieran entretenerse con mis aventuras o, mejor aún, las andanzas compartidas. Pero se acabó señores: ya no se puede mirar hacia atrás con una sonrisa, pintar las zonas oscuras para no asustar a nadie o disfrazarse de payaso. Cuando las noches son catastróficas se lo acepta y, si se quiere, se goza con el sufrimiento de la insatisfacción lograda.
¿Tres fiestas en una noche, recorrer toda la ciudad, irse a dormir a las 8:30 de la mañana? Cualquier hijo de vecino reconocerá que suena interesante, u osado o divertido. Nada más lejano. Continuando el post anterior, estoy cansado de la mediocridad emocional de todos los días, no sé lidiar con ella y no la tolero. Siempre las mismas caras, las mismas actitudes, la grosería, la monotonía. Y además el frío. Y además las limitaciones propias. Y además...
Analicemos puntos a favor y en contra. A favor:
1) El alcohol y la marihuana. Levantan cualquier noche y, sino, al menos le dan color. Hacen de lo insignificante algo pintoresco. Las muejeres feas se hacen un poco más deseables y a uno le importa todo un poco menos. No bastan para hacer la vida buena pero sí un poco menos mediocre.
2) Discutir con un policía: esos hijo de putas de azul repiten mecánicamente en todo medio público que están para defendernos. ¡Mentira!¡Vigilar y castigar! Sólo porque soy joven me quieren reprimir. Pero no tienen argumentos: "Circule, señor"; "¿Por qué? Yo me quedo acá"; "Justifique por qué se queda ahi"; "Porque soy un ciudadano y esta es mi ciudad"; "Voy a llamar a un patrullero". Mamma mia, no puedo esperar a tener 50 años. A esa edad te tienen miedo.
3) Las mujeres nobles que acompañan al camino. No son lo que uno busca, pero cargan con una nobleza y una bondad que uno las quiere igual. Son como la puta en el melodrama decimonónico, que debe morir por ser puta, pero que se sacrifica por el héroe. En el caso de ayer vamos a incluir en la lista a Josefina (la del síndrome Francia: el culo gordo), Mariposa (por el tatuaje que adorna sus pechos) y la amiga de Mariposa (sólo sé que es de Bahía Blanca). Mis cariños para ellas.

Ahora, los contras:
1) El frío: me gusta, pero a veces rompe las bolas. Es bueno porque obliga a la gente a vestirse y nos evita tener que ver a todo el mundo desnudo, cosa tan corriente y vulgar en nuestro tiempo. Además, nos causa dolor y experimentar dolor es una forma de sentir el cuerpo. Pero todo en su medida y armoniosamente.
2) Los tragos baratos: Llevan poco alcohol y gaseosas de marcas ignotas. Uno termina tomando Sprite del subdesarrollo, con nombres de provincias u onomatopeyas soeces (¡Pinga cola!) y además sale caro.
3) Las mujeres que uno desea. Son preciosas, histéricas y sólo saben hacer el mal. No les importa lo que uno quiere, juegan con uno como una marioneta y jamás se hacen cargo de lo que producen. Ayer me puse mi armadura de Mala Onda y mi escudo contra histéricas y las esquivé. Pero están en todos lados (ver el post anterior, sobre la Loba). Sólo dejan instaisfacción.

Ese fue mi panorama de la noche. ¿Algo más? El triunfo de Nalbandian, whisky, amigos que vomitan aliens, amigos que dudan entre mujeres bonitas o mujeres tetonas desde bares de mala muerte en Adrogué, dudas existenciales y estados de ánimo que varían cada 5 minutos, a causa de razones importantes o no importantes o confusas. En fin, c´est la vie.
Si alguien, de casualidad, lee esto, aquí va mi reflexión del día: ¡SOS! ¡ALGUIEN QUE ME DIGA COMO SEGUIR!

Saturday, July 16, 2005

Un problema animal

Este, por si usted no lo sabía, es el blog del Toro. Si bien es viril y altanero, el Toro también tiene sus problemillas. Y cuando la naturaleza juega sus trucos viles, incluso el Rey de las Pampas puede tambalear. Ocurre que el Toro es un bicho fontal, directo, sabe lo que quiere y como conseguirlo. Ve rojo y avanza; sangra y se enfurece.
Pero de la nada surge una lobita (título autoimpuesto, habrá que creerle) que mueve el rabo de una forma un tanto inusual, más bien sugestiva, digna de una zorra (en el sentido animal, no seamos malpensados). El Toro, que no es de hierro y gusta de las carnes tiernas, compra el juego. Y zas... como en las corridas, para un lado, para el otro, una humillación directa a su potencia animal. No hay animal más orgulloso que el Toro, salvo el León, pero en realidad el León es medio amanerado, vive de la fama que le hicieron más que de su real violencia salvaje. En fin, la loba hace de zorra pero se pone el traje de torera y el Toro va y viene, perdido entre el polvo que se levanta, la multitud en silencio y su propia sangre derramada.
Cansado de que le saquen el cuero, el Toro enfila para otros pagos y decide salir a cazar como él sabe, cuernos al frente. Si la loba quiere hacerse la gata, es su problema. Al Toro le apetecen panteras, pero el mercado viene flojo y en su largo recorrido nocturno no aparece ni una pantera interesante, tampoco chitas, ni pumas, ni siquiera alguna gatita con aires de grandeza. Entonces el Toro, que es sólido pero adaptable, se busca algo a su medida. A ver... una gacelita, tal vez, dulce y liviana, fácil de digerir. El primer escenario es una sucesión de gacelitas inmaduras, que quieren señorearse ante los ojos de machos hambrientos, pero se les nota el corto trayecto y uno sabe que comerse a un animalito así es jugar sucio. Cambio de escenario; grata sorpresa: toda la sabana junta se sublevó e incluso la selva y el sotobosque se sumaron en descontrol alocado. El Toro, que ya tiene sangre en el ojo, decide ser gentil y cortés con una gacela milagrosa: a pesar de su tierno aspecto juvenil, está en la flor de la edad y allí el Toro se relame: esta gacela permite ser perverso sin salirse de la Ley. Fenómeno fascinante: el Toro y la gacela no logran comunicarse, prolongados diálogos se extienden entre ambos, pero ninguno sabe de qué habla el otro. A la fuerza entiende el Toro que la gacela parte a otras tierras, a otro bioma como el desierto, por algunos meses.
El Toro arrastra las patas, afila los cuernos y embiste. La gacelita, dulcemente, se despide, aclarando que tal vez a su vuelta el Toro y ella pueden hablar y entenderse. El Toro, sumido en su potencia animal de conquista, no escucha ni comprende esta sutil invitación y se pierde la ocasión de llevar a otro nivel a la gacelita. El Toro parte, acompañado de su fiel amigo la Hiena, quien es depositado en sus aposentos, aunque sin reirse.
El Toro hace una breve parada técnica a saludar a unos amigos del bosque, que a semioscuras juegan a la Copa. Abatido, pero sin reproches, el Toro vuelve a su caverna. Se deposita en un rincón oscuro a cubrir con el sueño la insatisfacción de otra noche sin conquistas. El Toro sueña que es Matador y que al menos una vez no tiene que conformarse con lo que hay, sino embestir a la presa que más le gusta, la presa a su medida.

Friday, July 15, 2005

Mi actividad cinematografica reciente

Señores, antes de que me olvide, me agradaría sobremanera expresar un poco el estado de cosas en mi mundillo cinematográfico. A continuación, y sin elaborar demasiado, una lista de los films que vi ultimamente en DVD en mi casa. Todos ellos son piratas Y ME ENORGULLEZCO POR ESTO, ya que quien impulsa la lucha antipiratería es principalmente la Motion Picture Asociation of America, es decir, los magnates de Hollywood, los verdaderos piratas, dispuestos a conquistar nuevas tierras en sus barcos (o tanques, si somos más precisos) para opacar a las sufridas y restringidas expresiones cinematográficas locales. Suficiente de esta cháchara. La lista de las películas que vi en la última semana y una breve opinión:

Wimbledon (2004, Richard Loncraine): tierna comedia deportiva, sin mayores ambiciones. Notable el intento por darle dinamismo en el cine al tenis, deporte poco tratado por la pantalla plateada. Gracias al duro entrenamiento de los actores y a los dotes del motion control (cámara programada por computadora para reproducir exctamente un mismo movimiento las veces que sea necesario), un digno entretenimiento flemático, aunque muestra una leve tendencia a querer conquistar a los primos brutos, los gringos. Me encanta Kisrten Dunst porque no es objetivamente linda y podría ser la mina de la esquina, a mi alcance; además el buena actriz y el coloradito Bettany muestra ser siempre versátil.

La vuelta al mundo en 80 días (2004, Frakn Coraci): Tremendo bodrio, que no se salva ni por la presencia de dos enormes personalidades como Steeve Coogan o Jackie Chan. Falta de ritmo, cubierta de animaciones grasas y ochentosas y torpe en su fluir. La chica que hace de francesa está buena, pero ese acento me saca de las casillas. No llegué ni a la mitad del metraje, pero les aseguro algo: Schwartzenegger haciendo de turco es impagable porque ni siquiera abandona su acento austríaco, a pesar de llevar una absurda peluca enrulada negra.

Anchorman (2004, Adam McKay) y Dodgeball (2004, Rawson Marshall Thurber): las coloco juntas porque el nuevo equipo de compinches/amigotes/juglares que conforman Ben Stiller - Owen Wilson - Luke Wilson - Will Ferrell - Vince Vaughn no para de producir películas similares sin cansancio. No son malas películas y están dotadas de una liviandad y un grado de chabacanería adorables. Chistes a veces ingeniosos, a veces pésimos, mucha incorrección política y un invisible pero admirable manejo de cámara y espacio (apuesto a que nadie dijo esto antes, pero vean la cobertura de los partidos en Dodgeball y la pelea callejera en Anchorman y me darán la razón). Los directores son marionetas y el conjunto de acotres lo son todo, pero con suerte dispar: Stiller ya no para de repetirse y, si alguna vez fue el Dios de la comedia, ha caído en picada. Los hermanos Wilson saben sus limitaciones y sin embargo el encanto está intacto; será el legado de Wes Anderson, tal vez. Will Ferrell ha demostrado tener personalidad y empeño como para hacer roles diversos, pero la gran sorpresa es Vince Vaughn quien, luego de una decepcionante seguidilla de thrillers y dramones en los que parecía un niño fuera de la guardería, encontró su veta en estas comedias disparatadas y, admitamoslo, se luce. Repito: el argumento y demases son frutillas del postre, la gracia está en las caras y su interacción.

Primer (2004, Shane Carruth): tal vez el mejor film del año, absolutamente desapercibido en estos pagos. Lo dijo el Village Voice y yo lo tuve que comprobar. En la vida real, un matemático texano decide abandonar su trabajo y, con su dinero ahorrado, hacer una película. Se toma dos años para escribir el guión, para hacer todas las preguntas que le surgen y para leer libros. Con 7000 dólares, entusiastas amigos y varias cosas prestadas, hace una película. No sabe editar, así que se toma otro año para aprender y la edita él. Escribe, dirige, protagoniza, produce e ilumina la película, además de hacer la música. Su nombre es Shane Carruth y su pequeña joya personal arrasó con Sundance 2004; uno desconfía de esos lauros, pero esta vez hay que callarse la boca. Es un relato complejísimo, hermético, laberíntico, todos los adjetivos juntos. Mezcla de ciencia ficción y peuqeño drama burgués, se presenta como una especie de Pi (el film de Aronovsky) actual, pero aún más rebuscada. No basta una mirada para entender y tal vez nunca desentrañemos del todo lo que está pasando, o lo que pasó o lo que pasará. La información se va acumulando pero nada se aclara, sólo podemos especular, asumir, comentar entre nosotros. ¿Qué es esto que estamos viendo? ¿Vimos algo parecido antes? Sólo verla implica acercarse a ella porque describirla es una absoluta pérdida de tiempo.

En la próxima entrega, más títulos: Sin City, Baadasss!, Napoleon Dynamite y otras. Stay tuned.

Como inciar

La gente suele comenzar espectacularmente, hacer inauguraciones grandiosas, ominosas, pretenciosas. Yo no, señores. Al menos no hoy. Voy a abrir este blog con la letra de dos canciones de Pulp con las que me siento particularmente identificado, en especial en este trecho de mi existencia. Serán presentadas en su idioma original (ergo, inglés) y sin subtitular porque, a la manera de Boris Vian, je suis snob.
El Toro, por si alguna vez se lo preguntan, soy yo. Así me dicen, así me gusta y así me comporto. Si esto sigue sin responder a su pregunta, el problema me excede. Me mandan un mail, me invitan a salir (si son mujeres o, más importante, si NACIERON mujeres, en palabras de Vincent Gallo) y sino esperan a que algun día yo salga en la tapa del Espectáculos de Clarín. Cuando eso ocurra, sabrán que soy yo. Y si eso no ocurre, no desperen: sus vidas seguirán siendo igual de tristes, igual de monótonas y conseguirán menos sexo del que ustedes creen que se merecen.
A continuación, lo anunciado:

"Like a Friend", Pulp, banda de sonido de Great Expectations

Don't bother saying you're sorry
Why don't you come in
Smoke all my cigarettes again
Every time I get no further
How long has it been?
Come on in now, wipe your feet on my dreams
You take up my time
Like some cheap magazine
When I could have been learning something
Oh well, you know what I mean, oh
I've done this before
And I will do it again
Come on and kill me baby
While you smile like a friend
Oh and I'll come running
Just to do it again
You are the last drink I never should have drunk
You are the body hidden in the trunk
You are the habit I can't seem to kick
You are my secrets on the front page every week
You are the car I never should have bought
You are the dream I never should have caught
You are the cut that makes me hide my face
You are the party that makes me feel my age
Like a car crash I can see but I just can't avoid
Like a plane I've been told I never should board
Like a film that's so bad but I've got to stay till the end
Let me tell you now: it's lucky for you that we're friends.

"Common People", de Pulp, en el disco Different Class

She came from Greece she had a thirst for knowledge
She studied sculpture at St Martin's college
That's where I....
Caught her eye

She told me that her Dad was loaded
I said "In that case I'll have rum and coca-cola."
She said "Fine,".....
And then in thirty seconds time she said

"I want to live like common people
I want to do whatever common people do
I want to sleep with common people
I want to sleep with common people like you."

Oh what else could I do?
I said "I'll see what I can do."

I took her to a supermarket
I don't know why, but I had to start it somewhere
So it started .... there
I said "Pretend you've got no money."
But she just laughed an said "Oh you're so funny."
I said "Yeah?
Well I can't see anyone else smiling in here

Are you sure you want to live like common people
You want to see whatever common people see
You want to sleep with common people
You want to sleep with common people like me?"




But she didn't ... understand
She just smiled and held my hand

Rent a flat above a shop
Cut your hair and get a job
Smoke some fags and play some pool
Pretend you never went to school
But still you'll never get it right
`cos when you're laid in bed at night
Watching roaches climb the wall
If you called your dad he could stop it all yeah

You'll never live like common people
You'll never do what ever common people do
You'll never fail like common people
You'll never watch your life slide out of view

And then dance, and drink, and screw
Because there's nothing else to do

Sing along with the common people
Sing along and it might just get you through
Laugh along with the common people
Laugh along even though they're laughing at you
And the stupid things that you do
Because you think that poor is cool.

Like a dog lying in a corner
They will bite you and never warn you
Look out.

They'll tear your insides out

`cos everybody hates a tourist
Especially one who thinks it's all such a laugh
Yeah and the chip stain and grease will come out in the bath

You will never understand
How it feels to live your life
With no meaning or control
And with nowhere left to go
You are amazed that they exist
And they burn so bright whilst you can only wonder why.

Rent a flat above a shop
Cut your hair and get a job
Smoke some fags and play some pool
Pretend you never went to school
But still you'll never get it right
`cos when you're laid in bed at night
Watching .... roaches climb the wall
If you called your Dad he could stop it all, Yeah.

Never live like common people
Never do what common people do
Never fail like common people
Never watch your life .... slide out of view

And then dance, and drink, .... and screw
Because there's nothing else to do

I want to live with common people like you.
etc...


Espero que sean felices. Volveré y seré Melvin van Peebles.